Capítulo 1.

Todo comienza en una pequeña casa en los alrededores de Murcia, ya empieza a hacer frío la llegada del otoño, Verónica y su madre una mujer alta entrada en los 40 años y muy delgada la abraza…
Madre: cariño, se que tu querías estar en ese colegio, pero no ha podido ser... aun podemos intentarlo en otro…
Verónica: no pasa nada Mamá, ¿De que instituto me hablas?
Madre: pues ese instituto se llama “ Montar lorc” , es uno de los institutos más caros de Murcia pero si tu me prometes que vas a estudiar y te vas a esforzar porque es privado y eso significa que cada mes hay que pagar..
Ya han llegado a su casa, saludan a uno de sus vecinos y pasan, una casa pequeña de colores vivos, su padre las estaba esperando…
Padre: ¿Y qué tal?
Vero: pues que tengo que buscar otro instituto…
Verónica se sube hacia su habitación esta un poco desanimada pero se pone a pensar en todas las personas a las que podrá conocer… se queda durmiendo…
13 de septiembre…
Verónica esta en su pequeña cocina con una tostada de mantequilla, su padre esta a su lado con una taza de café, se oye la puerta su madre acaba de entrar se sienta en la mesa con unos papeles en la mano, se los muestra a su padre el hace un gesto de aprobación…
Vero: entonces, ¿Ese va a ser mi nuevo instituto, verdad?
Madre: si y tengo una buena noticia para ti, justo cuando entre a dirección me encontré con una de tus amigas “Silvia” y me dijo que ella también va a entrar.
Verónica se alegra por lo menos podría hablar con alguien el primer día…

Madre: mañana a las 8 hay un examen para ver vuestros niveles y según esto comenzáis en día 15.
Alguien toca el timbre, Verónica es la que va a abrir, sus amigas entrar como siempre haciendo ruido, dos chicas una muy alta, rubia y con una bonita sonrisa la otra era todo lo contrario baja, morena y con una extrema delgadez sus amigas se abalanzan sobre Verónica, cierran la puerta y se van a pasear, pasados unos minutos se sientan en el banco más próximo…
Lorena: te vamos a echar muchísimo de menos.
Verónica: parecéis tontas no vamos a ver todas las tardes, ya lo veras…
Laura: eso espero, porque si no te damos la lata y venimos a molestarte a tu casa.
Se ríen no se dan cuenta pero los minutos van pasando rápidamente, enfrente hay unos chicos sentados están fumando ni si quieran tendrían 15 años, las amigas se van se despiden en la puerta…
Verónica se va hacia su habitación comienza a leer su libro favorito, se acaba quedando durmiendo…